(Dales un dedo, y te cogerán todo el brazo)
“11 Familias musulmanas renuncian a la beca comedor en Zaragoza por no disponer de MENÚ HALAL” (titular: Heraldo.es de Zaragoza). Y la culpa, como siempre, es nuestra, perros infieles occidentales, vendidos al capitalismo judeo-americano; porque de la Portentosa Zurdería Española(sic), anticapitalista, antisemita, antidetodo, seguro no es; conocida es la Islamofilia Crónica, que no se sabe bien padece o goza la progresía, y como bien dice el Infiel Refranero de los Cristianos, sarna con gusto, no pica. En estos comedores escolares ya se ofrecían menús exentos de carne de cerdo y también vegetarianos, para alimento y regocijo del Islam y del Opinante Veganismo, sectas de moda por aquí, esperemos que por poco tiempo.
Los decadentes occidentales somos caprichosos y comemos de todo; empezamos con los restaurantes chinos y los puestos callejeros de perritos calientes y hamburguesas. Luego las pizzas. Y el pecado crudo japonés, sushi o como lo llamen. Y ahora son los burritos y kebabs los que están de moda entre la nueva ola. La “oferta exótica” es completa…pero el comedor del cole no debe de ser un restaurante exótico.
Y ofrecer “Menú Halal” es como ofrecerles “comer a la carta” a los estudiantes, y en el caso de los colegios públicos, a costa del contribuyente; este pluralismo cultural es poco educativo y no fomenta la inteligencia del educando; de hecho, a los jóvenes les prolonga la adolescencia (burrolescencia) hasta los treinta años o más, y encima haciéndoles creer que gozan de mundología y cultura general.
Un buen ejemplo de lo anterior está en cómo beben la cerveza Corona, que aquí venden con la marca Coronita, por cuestiones de cursilería u objeciones de (desde) la Casa Real; conocidas son las dos versiones y sus variantes.
Ocurre que al típico burrolescente, después de destapársela, le sirven la botella de Coronita después de volverla a tapar con un trozo de limón; el joven se la echa al gaznate(*) sin quitar el limón; y empiezan los problemas; muchas veces se traga el limón, y tampoco pasaría nada si no se atragantara; pero si se atraganta, se ahoga; si se ahoga, se acojona; si se acojona pide auxilio asina mismamente “socogo, socogo”, socorro, socorro; y parece que ha aprendido a hablar Francés, la ERE, con el limón suena EGE; ¡SOCOGO, SOCOGO!…pero no ha aprendido Francés, ni Inglés; de hecho por no saber no sabe ni Español…lo que ocurre es que ES TONTO; tonto del culo, para más señas.
Y una manera como otra cualquiera para fabricar un tonto es darle de comer a la carta en el cole.
(*) En Méjico sirven a veces la cerveza con una pequeña rodaja de lima o limón en el borde de la boca de la botella, se supone que para que el cliente la limpie de posibles bacterias sin que entre el zumo, para a continuación tirar esa lima o limón, y beberse la cerveza ya como una persona normal, o sea directamente de la botella, o vertida en un vaso, copa, o jarra. Y ESTO SI ES mundología y cultura. Y un consejo más, este gratis et amore(**); las cervezas mejicanas, Modelo y DOS EQUIS (XX), traen de por sí poca espuma: no hace falta inclinar el vaso al verterla.
(**) “Gratis et Amore”…no tengo culpa de la Logse, pregunten por ahí a alguien de letras.
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